
Uno de los activos más importantes de la empresa es la información. Protegerla o aprender a protegerla es prioritario sea cual sea el tamaño de la compañía. Es clave porque las brechas de seguridad afectan tanto a la productividad como a la propia imagen de las empresas. A continuación, recopilamos una serie de recomendaciones básicas:
Controlar el acceso a la información
Cada tipo de empleado solo deberá acceder a determinados datos, los necesarios para desarrollar su trabajo. Si una persona no puede acceder a determinada información vital de la empresa, no la pondrá en peligro.
También es útil limitar el acceso a funcionalidades dentro del equipo para no descargar e instalar cualquier tipo de programa.
Concienciar al personal
La seguridad de la información no depende únicamente de las amenazas externas. En muchas ocasiones el problema se debe a un error humano. Además de charlas, disponer de un manual básico de uso de la información en la empresa es positivo.
Tener el sistema de seguridad actualizado
Tanto el firewall como el antivirus deben actualizarse.
Hacer copias de seguridad
Actualmente existen soluciones digitales para que las copias no sean físicas. Una de ellas es la tecnología cloud que permite acceder a la información cuando y donde quieras.
Reforzar las contraseñas
Toda clave es hackeable. Si bien es cierto que hay niveles y grados de seguridad. Opta por aquellas que sean alfanuméricas y robustas.
Implantar filtros de spam en el correo
A pesar de evitar muchas amenazas, habrá correos válidos que terminen en la carpeta de correo no deseado.
Todas las anteriores medidas y la precaución serán necesarias para velar por los datos de la empresa.
Fuente: Business Insider España